11 DE ABRIL DE 2012

El acero es un material que facilita el diseño y la construcción

Por Fernando Guarello,

Arquitecto, socio del estudio GuarelloArq,

El Mercurio

El acero es uno de los tres materiales preferentes de la arquitectura contemporánea, junto con el hormigón armado y el vidrio.

Su gran presencia en las edificaciones se debe a la gran plasticidad y trabajabilidad que posee y que permite una infinidad de posibilidades en el diseño arquitectónico.

Debido a sus características, el acero tiene un comportamiento estructural único, ya que se pueden diseñar piezas en formas y dimensiones específicas para resistir deformaciones y esfuerzos que serían imposibles de lograr con otros materiales equivalentes. La capacidad elástica del acero permite que se puedan construir grandes edificios, puentes u otras obras y calcular su deformación, de modo que puedan responder satisfactoriamente a los efectos de un sismo sin llegar al rompimiento de la pieza o, peor aún, al colapso.

Las capacidades de tracción, compresión y elasticidad permiten al arquitecto conceptualizar estructuralmente el proyecto sin necesariamente hacer cálculos ni ecuaciones y también facilita la retroalimentación que se requiere con el ingeniero estructural en las definiciones de diseño. Y precisamente debido a sus características de flexotracción y elasticidad, los edificios hechos en estructuras de acero pueden deformarse en forma calculada y precisa, es decir, pierden su forma y la recuperan volviendo a su estado original. Esa deformación es la capacidad sísmica del edificio, que es algo que los ingenieros calculan dentro de los estándares de las normas y de las curvas espectrales de aceleración del suelo producidas por un terremoto.

 

 

En Chile, existen muchos buenos ejemplos de arquitectura en acero, principalmente en las áreas de edificación de oficinas, supermercados, infraestructura e industrial.

En nuestro caso, hemos diseñado -entre otras- la planta Sandvik Mining & Construction Chile, que con más de 22.000 metros cuadrados en cinco edificios combina usos de talleres multipropósito, logística y almacenaje, servicios y oficinas administrativas para productos y maquinaria de la industria minera para Chile y la región. Debido a la gran cantidad de requerimientos técnicos, esta instalación es básicamente un 80% de acero y el resto hormigón armado, combinando grandes luces, grúas de alto tonelaje, áreas técnicas y flujo operacional.

El diseño en acero permitió generar espacios abiertos, integrando las áreas y la conectividad en los procesos de manera lógica y eficiente.

¿Qué pasa con la vivienda?

En países cuya cultura de la construcción proviene históricamente de la madera, como el norte de Europa y de Estados Unidos, el acero estructural liviano es un material que hace varias décadas ha reemplazado completamente a la madera como componente principal para la estructura de las viviendas y edificaciones de envergadura menor.

En contrapartida, en Chile las viviendas masivas y también unifamiliares, salvo el uso de barras de refuerzo para el hormigón, el acero aún es un material de baja consideración para los compradores y usuarios finales de las viviendas. Esto se debe probablemente a que tenemos una cultura heredada de la Europa mediterránea, principalmente España, cuya preferencia histórica es la construcción en piedra y derivados. Esta tradición no escrita hace que los chilenos, en general, tengan una mayor preferencia por las casas de albañilería u hormigón, porque dan una sensación de seguridad y durabilidad; sin embargo, esta tendencia ha ido cambiando en los últimos años, ya que los usuarios están más y mejor informados que antes.

Con 25 años de historia, nos hemos ganado un espacio importante para la representación de los arquitectos en el debate público y frente a la autoridad. Buscamos tener una voz nítida y respaldada técnicamente, queremos llegar con nuestro mensaje a la opinión pública, y ser capaces de construir una red amplia de vínculos con la sociedad.