La actividad se extendió por una semana entre el 15 y el 21 de mayo y comenzando en Brasilia, donde los participantes pudieron visitar obras de Oscar Niemeyer tanto en solitario como en colaboración con Lucio Costa, como la Plaza de los Tres Poderes, el Palacio de la Alborada, la Explanada de los Ministerios, el Museo Nacional Honestino Guimarães, la Catedral Metropolitana de Nuestra Señora de Aparecida y la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima.

Luego, la Misión se dirigió a Río de Janeiro, para visitar emplazamientos como el Museo del Mañana de Santiago Calatrava, la Catedral Metropolitana de Edgar de Oliveira da Fonseca y más del trabajo de Niemeyer: el Hotel Nacional de Río y el Museo de Arte Moderno, entre otros.